miércoles, 11 de noviembre de 2015

Encuentro de las Galaxias

Este domingo se realizó la segunda reunión de coleccionistas y fanáticos de la saga de la Guerra de las Galaxias, en el parque Rivadavia, organizada por un grupo de Facebook denominado “Star Wars Argentina”. Allí se congregaron unas cuarenta personas de diversas edades con la finalidad de despuntar su vicio. Si bien todos estaban hermanados por el amor a esta producción a la cual rinden culto, se confluyeron algunos subgrupos que perseguían diferentes objetivos.

Por un lado, estaban los que hacían el intento de conseguir nuevos adeptos. El más entusiasta, a pesar del excesivo calor, no dudo en disfrazarse de uno de los más populares personajes del film. Debió soportar estoicamente un casco que embota los sentidos de cualquiera, una pesada capa y ropaje diseñado con telas excesivamente gruesas y para colmo, de color negro. Pero todo eso quedaba a un lado cuando los niños, y no tan niños, que peloteaban en el parque, se abalanzaban sobre él, en búsqueda de una foto con Darth Vader.

En las mesas de cemento, típicas del lugar, con su ajedrez de mosaicos en cada una de ellas, se ubicaron los coleccionistas a realizar intercambios de muñecos o bien presumir de aquellas adquisiciones más difíciles de hallar.

Las mismas iban desde pequeñas figuras de cuatro pulgadas hasta naves que superaban ampliamente los sesenta centímetros. Había para todos los gustos, una amplísima variedad de motivos, desde juguetes actuales con luces y sonidos, acabados cromados e hiperdetallados; hasta antiguas piezas fabricadas en los años setenta, época del estreno de las primeras películas. Estas son muy básicas y poco detalladas, pero, a diferencia de las actuales, portan esa magia que encierra dentro suyo recuerdos de infancias felices, en donde la imaginación suplía todo aquello que el juguete carecía.      

Esta “juntada”, como ellos mismos la denominan, no pasó desapercibida para los comerciantes de la feria del parque, quienes llenaron sus puestos al punto de desbordar de mercadería de la Guerra de las Galaxias. Por ende, era posible adquirir una variada cantidad de souvenirs, como ser llaveros, réplicas de los sables jedis, muñecos, miniaturas de legos, remeras y gorras estampadas con dicha temática. 

Dos puestos se destacaron sobre el resto: Does Toys, cuyo dueño, Diego, puso a la venta un lote inmenso de figuras importadas muy difíciles de conseguir  lo que provoco la locura de aquellos coleccionistas más viscerales. Otro puesto fue montado para presentar y comercializar un libro llamado “Guerra Estelar”, el cual recopila todos los manufacturados ya sea mercadería de diversa índole, abarcando desde productos alimenticios, promociones y demás que se han fabricado en nuestro país conteniendo la licencia de la película en cuestión.

Este material gráfico, emocionaba a quienes lo ojeaban, al posibilitarles recordar los vasos de vidrio de Pepsi de los ochenta, los muñequitos del chocolatín Jack o los juguetes hechos en Argentina por la empresa Top Toys, hoy día considerados objetos de culto por sus admiradores más acérrimos. 

Siempre es una experiencia amena concurrir a este tipo de reuniones, ya que se percibe un clima de camaradería, una extraña sensación que he denominado “hermandad fílmica”, donde no existen divisiones sociales, culturales, etc. Una especie de homogenización, efímera si se quiere.  A pesar de no ser un gran conocedor del tema en cuestión, fui invitado a la foto conmemorativa, que fue el broche culmine de la reunión.           

La tarde comenzó a difuminarse,  la gran mayoría se fue alejando  poco a poco de las mesas,  mientras otros embalaban sus tesoros más preciados con quirúrgico cuidado; la ceremonia de finalización es en exceso metódica y detallista, manipulan cuidadosamente las cajas y las guardan en el baúl de sus autos, o bien en bolsos y mochilas para que regresen a sus casas sanas y salvas. Otros se retiran felices y su sonrisa es proporcional a la cantidad de ventas realizadas. Las manos se estrechan en  saludos afectuosos y al llegar a sus casas, el intercambio y las charlas volverán a ser virtuales, por lo menos hasta la próxima edición de este encuentro.

domingo, 7 de junio de 2015

Duelo parejo en el Romero Brest

En un encuentro correspondiente a la Liga de Honor Caballeros, disputada en el estadio Romero Brest, Ferro Carril Oeste, el local, se midió ante Nuestra Señora de Lujan.



     El partido se caracterizó, por ser parejo durante la mayor parte del mismo, ya que luego de una conversión, el equipo contrario salía rápidamente en ataque y no tardaba en conseguir un gol.
    Por parte del visitante destacó la creación de juego de Rodrigo Mangione, asociándose con el jugador Rodrigo Muras; además, el armador Martin Mangione se las ingeniaba para convertir al filtrarse en la defensa o bien generaba tiros libres favorables a su equipo al ser víctima de infracciones por parte de los locales.

   En Ferro destacó la capacidad goleadora del lateral Manuel Crivelli y el aporte vital, tanto en defensa como en los lanzamientos en ataque del otro lateral, Marco Arce.

   Ambos equipos cometieron reiteradas faltas, en su mayoría penalizadas culminando en la descalificación de Breuer , la cual desato protestas de los jugadores de Ferro y el hecho de que Lujan quedara , durante más de un minuto con tan solo tres jugadores de campo y el arquero.

    La primera etapa finalizó con un empate en 10 goles. El D.T de Lujan, Martínez, en la charla técnica, hizo hincapié a sus jugadores en la concentración en el ataque y les indico que se mantengan firmes la defensa; especificándole al pivot Merelas que aprovechara el hueco que dejaba Crivelli en defensa al atacar, por ultimo hizo mención sobre la importancia de neutralizar a Marco Arce. “¡el 11 de ellos no puede tirar solo, resolvamos este problema!” sentenció.

    Mariano Muñoz, central de Ferro, les indico, desde el banco, a sus compañeros  que ganaran el medio, a raíz de que su equipo perdió seguido la pelota en la primer mitad del encuentro.
    El segundo tiempo fue de menor intensidad que el primero, con varios goles errados e imprecisiones; aunque la paridad siguió marcando el rumbo del partido.

    Los factores determinantes para la levantada de Ferro, sobre el final, fueron los dos penales a favor que tuvo Lujan y no consiguió marcar, ya que de haberlos convertido, le hubieran significado una buena diferencia a su favor; sumado a la salida de Martin Mangione, reemplazado por Magadan, a causa de su agotamiento físico. Estos factores fueron una bisagra para Ferro evidente  en el festejo por la atajada de Chedrese, quien había reingresado por Devida, con esta finalidad; y la motivación que mostró el equipo en los últimos minutos en contraposición a la poca precisión en el ataque del visitante en el tramo final del partido.

    López Mon consiguió la igualdad y Arce aventajo al local consiguiendo el  21-20 en el marcador.
    Faltando un minuto y medio, en el Time Out, el entrenador  de Ferro, Diego Cajales, les indicó a sus dirigidos la manera de encarar el final. “Juguemos el uno contra uno, y seguramente nos van a hacer una falta”.

    A falta de treinta segundos, el extremo venezolano,  Douglas Finkelstein decretó el 23-21 definitivo. El encuentro finalizo con Lujan intentando recuperar la pelota en la mitad de la cancha, y Ferro controlando la pelota hasta el final del mismo.


    La figura fue el armador lateral izquierdo de Ferro Carril Oeste, Marco Arce. El mendocino, que cuenta con experiencia en la selección nacional, fue el goleador del partido con 8 goles y consiguió romper reiteradas veces la defensa desde la línea de nueve metros, lanzando potentes disparos que  significaron un gran problema para el equipo visitante.